miércoles, 26 de septiembre de 2012

Embarazos adolescentes: ¿juego de niñas?

26 de septiembre día de la prevención del embarazo adolescente
 
*Emma es una bachiller de 17 años que acaba de ingresar a las filas de los jóvenes que no tienen dinero para entrar a la universidad ni consiguen trabajo porque les exigen tener experiencia.
 

Su madre falleció en un accidente de tránsito cuando Emma era pequeña y nunca conoció a su padre. Una tía materna se encargó de la crianza de ella y su hermana mayor pero no tiene buena relación con su tía-mamá porque es maltratadora y todo el tiempo reniega de su situación económica culpando a sus sobrinas de su pobreza.
 

Hace dos semanas Emma se enteró de que estaba embarazada y se encuentra muy angustiada porque sabe que su tía la echará a la calle si conoce su situación. Su novio de tres años, compañero de colegio y sin poder capacitarse como ella,  le dice que no entiende lo que sucedió porque siempre usó condón y es tan pobre como ella.
 

 Esta historia real forma parte del 17 por ciento de adolescentes colombianas, entre los 15 y 19 años, que están embarazadas o ya lo han estado. Si Emma decide tener su bebé aumentaría el 14 por ciento  de madres adolescentes que hay en nuestro país, agravando aún más un problema de salud pública que preocupa a las autoridades y entes de salud públicos y privados.
 

 ¿Cuáles son los factores que contribuyen al embarazo adolescente?
 
 
Tradicionalmente se ha hablado de la edad temprana de inicio de las relaciones sexuales de los adolescentes, del desarrollo físico precoz de las niñas, de la globalización y acceso de los jóvenes a diversos estilos de vida, a la mayor libertad en la adolescencia y, finalmente, a la influencia de la publicidad y medios de comunicación que hacen ver el sexo como algo divertido y sin mayores consecuencias.
 
 
 Sin embargo, no podemos pecar de simplistas y quedarnos ahí. La situación económica de nuestro país que obliga a las menores a ingresar desde niñas al mercado laboral, así como fenómenos de violencia como los desplazamientos forzados y el maltrato intrafamiliar, empujan a las adolescentes a abandonar la escuela, adoptar comportamientos de adultas que cuidan de sus hermanos menores y a abandonar temprano sus hogares por el abuso sexual al que son sometidas.
Aunque las ciudades grandes como Bogotá, Medellín y Cali, presentan índices altos de embarazos adolescentes, las comunidades pequeñas son proporcionalmente preocupantes; dentro de estas, las poblaciones afrodescendientes, rurales o indígenas también revelan cifras altas de gestaciones tempranas.
 

 Según la Encuesta Nacional de Demografía (2010), el 64 por ciento de adolescentes que esperaban bebé o ya lo habían tenido, no lo habían deseado. Estos datos alarmantes hablan de jóvenes que quizás conozcan los métodos de planificación pero no tienen fácil acceso a los servicios de salud o tienen temor de ser cuestionadas por el personal que los atiende.
 

Además, si las adolescentes no tienen opciones de estudio o trabajo digno, sus condiciones de extrema pobreza, de maltrato y de condiciones de vida indignas les hará cada vez más difícil vislumbrar un proyecto de vida responsable y lleno de esperanza.
 
 
El fenómeno del embarazo adolescente es complejo y multifactorial de manera que todo análisis que se haga debe ser bienvenido para que todos sin igual, desde lo estatal o privado,  diseñemos y concretemos  nuevas políticas que lleguen a reducir el porcentaje de niñas que aprenden a ser mamás a la fuerza, sin posibilidades reales de progreso y bienestar personales.
 

*Nombre ficticio
Ingresa para mayor información a www.profamiliajoven.org.co

martes, 18 de septiembre de 2012

¿Qué está pasando con los adolescentes de hoy?

Por: Nereyda Lacera
Sexóloga de Profamilia.

Si eres de las personas que a diario leen y escuchan las noticias del mundo seguro te habrás sorprendido con aquellas que tienen que ver con asesinatos, violaciones y vandalismo cuyos protagonistas son adolescentes.

Me preguntaba hace unos días una sobrina el por qué los chicos de hoy, casi unos niños, tienden a ingerir licor y drogas desde temprano, a atropellar y montársela a un compañero de clases o a participar como sicarios en un asesinato. ¡No supe qué responderle!

¿Será que los jóvenes de hoy son más atrevidos y desafiantes que los de hace unas décadas?

Pues para el psiquiatra y psicoanalista Guillermo Carvajal que acaba de publicar un libro llamado ‘Prioridad: Pervertir a los niños’, producto de una investigación que realizó tratando de entender el cambio generacional de niños y adolescentes: la generación “net”, son unas mentes con “mezcla de máquina y persona donde la computadora juega un papel primordial”, según sus declaraciones.

Asegura el Dr. Carvajal “que los infantes y jóvenes están cada vez más desprovistos de las cosas que consideramos importantes en nuestra crianza. Son más rebeldes, incrédulos, curiosos, sin límites en su conocimiento, con una percepción compleja que les permite realizar con éxito varias actividades al mismo tiempo”.

Sin embargo, asimismo han desarrollado una tendencia brutal a la acción sin pensamiento, con gran osadía y sin medir las consecuencias; además, agrega el psiquiatra, que han encontrado nuevas maneras de mirar la realidad y la sexualidad en lo que todo está permitido.

En la reseña que presenta el libro ‘Prioridad: Pervertir a los niños’, el autor habla de la influencia de las nuevas tecnologías que ha creado una nueva sociedad, el mundo en red, y una nueva manera de relacionarse y de estar en el mundo: la mente en red.
 
Este mundo de híper-comunicación… aísla, narcisifica y autistifica, con las consecuentes: baja frustración, mente omnipotente, egoísmo extremo, tendencia a la acción sin límites y regido por una ética del narcisismo. Todo esto explicaría en parte la escalada suicida que se observa en los jóvenes del llamado mundo de la posmodernidad.

Carvajal expone la falta de compromiso de los chicos tanto en la escuela –que les aburre– como en la vida misma, incluyendo la falta de espiritualidad. Según sus palabras, “la sexualidad cruda y desafectada, buscando la satisfacción inmediata de los deseos, y noviazgos que están siendo reemplazados por relaciones espontáneas basadas en el sexo. Y agrega que “a esto se suma un marcado rechazo a la escuela, un constante aburrimiento e infelicidad.”

Concluye el autor: “no olviden que hoy a nuestros niños y jóvenes les sobra información, lo que hace imperativo organizarla para que les sea útil y productiva y encuentren en ella valores agregados que aporten a su formación como seres humanos”.
Tomado de Carvajal, G. (2012). Resumen-reseña del libro “Prioridad pervertir a los niños”. Bogotá: Tiresias.

martes, 4 de septiembre de 2012

Si al sexo seguro

¿Sabías que la televisión transmite a diario miles de imágenes sexuales, pero la gran mayoría de esas imágenes no muestran actitudes de auto-seguridad, abstinencia o uso de métodos de planificación?
 
 
¿Acaso recuerdas alguna escena erótica de novela o película televisiva en que los participantes usen el condón?
 

A pesar de las campañas publicitarias y programas de prevención de embarazos e infecciones, que hablan del sexo seguro, las personas desde su infancia y adolescencia, están viendo y escuchando mensajes tácitos o evidentes que muestran al sexo como algo casual que no merece protección.
 
 
En la última encuesta de Profamilia (ENDS, 2010) se afirma que una de cada cinco mujeres no identifican el uso del condón como el método más eficaz para prevenir infecciones de transmisión sexual y la misma proporción no justifica negarse a tener relaciones sexuales si el esposo o compañero tiene una infección.
 

En los grupos de jóvenes universitarios de todas las latitudes vienen aumentando los “ligues” o encuentros casuales en los que predomina el sexo sin protección, ya sea porque no estaban preparados o porque mezclan el alcohol y las drogas con la relación sexual de un ratico.
 
 
¿Qué hacer para practicar el sexo seguro, sin exponerse a todo tipo de infecciones y VIH, o a embarazos no deseados?
 

Primero: tomar conciencia acerca de los problemas de salud sexual y salud reproductiva que causan las relaciones sexuales sin protección. Para esto hay que educarse en sexualidad mediante lecturas, conferencias, campañas y sobre todo, autocontrol y respeto por el propio cuerpo y el de los demás.
Segundo: Las caricias íntimas NO son un método seguro de protección sexual. Si la pareja tiene juegos con roce directo de sus genitales, aún sin penetración, existe la probabilidad de embarazos o infecciones.
 

Tercero: Muchas parejas jóvenes que aún no desean tener una relación penetrativa, acuden al sexo anal u oral para no perder su virginidad. Si no usas condón en estos tipos de contactos eróticos, estás expuesto a perder tu salud sexual por el alto riesgo que tienen estas conductas sexuales a transmitir infecciones y VIH.
 
 
Cuarto: El condón debe convertirse en tu amigo leal; compra varios y mantenlos en tu cartera o billetera para cualquier eventualidad, especialmente si no tienes pareja estable. El sexo casual o de sólo una noche, abre las puertas a problemas sexuales si te olvidas de usar el preservativo. ¡Al día siguiente vienen los ay ay ays!
 
 
Quinto: El hecho de que tengas sólo una pareja, pero  luego terminas la relación y empiezas otra, y otra más pasados unos meses o años, no te protege cien por ciento de una infección. SIEMPRE debes usar el condón con cada pareja nueva que tengas, así esta relación sea estable y presumas de conocer a esa persona. Nadie conoce el pasado sexual de nadie, así que no te confíes.
 
 
Sexto: Las mujeres deben aprender a exigir el uso del condón. No le dejes esa decisión a tu parejo ya que el cuidado del cuerpo comienza por una misma. Si tu hombre se molesta porque le pides que se lo ponga, aléjate de él ya que no te valora ni piensa en el cuidado de ambos.