Cada cuatro años se realiza el mundial de fútbol, el evento deportivo más popular del mundo y que aglutina a millones de personas alrededor de un deporte que emociona y contagia. Y con esa celebración, el país anfitrión de turno moviliza campañas que promueven la prevención de infecciones de transmisión sexual y VIH, mediante la repartición gratuita de condones a los aficionados y turistas.
En Brasil se pretende más que eso. Con la iniciativa del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre VIH y Sida (ONUSIDA) y en colaboración con el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y otras entidades como FIFA, se desarrolla la campaña “Protege la Meta” que tiene como objetivo la promoción de acciones de prevención del VIH entre los jóvenes y la prevención de embarazos adolescentes.
La preocupación de las autoridades mundiales no cesa, especialmente en lo que concierne a la juventud. En Latinoamérica, menos del 30 por ciento de personas entre 15 y 24 años identifica correctamente la manera de prevenir la transmisión sexual del VIH, y sólo el 30 por ciento de las mujeres entre 20 y 24 años afirma haber usado el condón en su último encuentro sexual.
El futbol tiene un potencial enorme de convocatoria en los jóvenes y por eso la ONUSIDA quiere promover una campaña que refuerce la meta de Cero nuevas infecciones por VIH, Cero discriminación y Cero muertes relacionadas con el Sida.
Durante las jornadas futboleras del Mundial Brasil 2014, todo el mundo va a hablar de jugadas, gambetas, tiros libres y goles. La campaña “Protege la Meta” quiere llegar a los jóvenes para que cuiden sus cuerpos, reconozcan el consumo de alcohol y de alucinógenos como facilitadores de conductas sexuales de riesgo, y no olviden usar preservativos en sus relaciones sexuales.
A propósito, en Colombia la ONUSIDA acaba de firmar un pacto con la Secretaría de Salud de Bogotá para reducir a cero los casos de VIH. Si tenemos en cuenta que los casos reportados en 2013 aumentaron 23% más que el año anterior, y que la gran mayoría (84.9%) ocurrieron entre los 15 y 44 años, es perentorio continuar luchando para concientizar a las personas a que se protejan con el condón y se hagan las pruebas para el VIH como parte de sus chequeos médicos rutinarios.